martes, 11 de septiembre de 2012


Ratasvoladoras de colores... ¿¡y después quÉ!?


   Si aún no lo saben o si son ingenuos o si no quisieron informarse o si son románticos pues sépanlo ustedes todos que ¡¡¡LAS RATASVOLADORAS SON UNOS ANIMALES ASQUEROSOS!!!
   ¿Que por qué?
   ¿¿¿¡¡¡QUE POR QUÉÉÉÉÉ!!!???
  ¿Cómo que por qué?
  La imagen idealizada de unas criaturas encantadoras, dóciles y amorosas que las ratasvoladoras se han ganado a pulso de santa convivencia con el género humano es falsa. No sé cómo o por qué diablos es que nuestros antiguos y no tan antiguos no se dieron cuenta o no se quisieron dar cuenta de la verdadera naturaleza despreciable de las ratasvoladoras. La verdad es que no se me ocurre, lo juro, una explicación satisfactoria para justificar el nombre que se les da a estas supuestas bienaventuradas aves (que son plaga en todo el mundo), ya que para nombrarlas se ha usado el sustantivo rata (roedor de tamaño respetable que, si no vive en un laboratorio, es un mamífero destinado a coexistir con la inmundicia y las enfermedades con la consecuencia de la transmisión de dolencias fatales para los seres humanos) con el adjetivo voladoras ( rata + voladoras =  ratasvoladoras ) para darle nombre a un pájaro que, si le hago caso al sustantivo previamente citado, debe ser un pajarón muy asqueroso, ¿o no?
    Otro misterio más de los Misterios-Misteriosos de este nuestro hogar llamado Tierra.
   Jhonny... ¿cómo diablos se las arreglaron estas cochinas aves para que su infecta naturaleza no sea advertida y declarada por la mayoría de esta ingenua humanidad? ¡Ah, mira tú, he ahí la respuesta! INGENUIDAD.
    Siempre caemos por ingenuos.
   Y, claro, gracias a esa ingenuidad es que un par de artistoides europenses idearon un proyecto para pintar ratasvoladoras y hacer que estas nauseabundas criaturas se vean así:

   Sí, es terrible, no solamente las ratasvoladoras se han asegurado un falso prestigio entre los humanos sino que ahora esos ingeeeeenuos humanos las pintan para... ¡¡¡hacerlas más bonitas y perpetuar la descarada percepción que estos monstruos de la suciedad le han hecho creer a nuestra mongolona sociedad!!!
   Y, no, por más que me duela admitirlo, no, Jhonny... ¡esto no es Photoshop! 
 ¡Oh, qué tiempos oscuros se avecinan para nosotros, hermanos! ¡...ratasvoladoras de colores...!
   Por si no lo saben queridos hermanos y hermanas en la fe (sea cual sea que esa fe sea, da lo mismo) es proclamado que ¡¡¡ ...las ratasvoladoras son una de las criaturas urbanas no humanas más antisépticas que pueden existir en esta bendita tierra de Dios, alabada sea su Gloria, pues estas despreciables criaturas son bestias carroñeras que comen basura, meten sus cuerpos en las bolsas de desperdicios, entierran el pico en las cochinadas que dejamos a nuestro paso por los parques, se bañan en las putrefactas aguas que se acumulan en pozos, canaletas, macetas, llantas, arreglos florales y demás lugares posibles de acumulación de aguas, duermen y caminan sobre sus propias heces, espían nuestras casas con absoluta codicia, son caníbales, eso está probado, entran en nuestras pollerías para pecar comiendo la carne de sus pollíneos parientes sacrificados en el fuego del asador y son fieles seguidoras de Colibritany.... !!!

   Ciertamente que el daño causado por estas rastreras alimañas ya no se puede remediar. Fueron siglos de siglos de minuciosa labor de lavado de cerebro por parte de las ratasvoladoras. ¡Admirable! Intentar poner en la sesera humana que estas criaturas son sucias y transmisoras de enfermedades es casi tan imposible como pretender enseñarle a un sacerdote católico que los niños no deben ser objeto de abuso sexual. Así de grave es el asunto.
   Humanos todos denle las gracias de esta blasfemia al artista suizo Julian Charriere y al fotógrafo alemán Julius von Bismark quienes se encargaron de colorear a las aladas criaturas para soltarlas en la plaza de no sé qué ciudad italiana llena de agua y canales y puentes y góndolas y gondoleros y cuyo nombre no me recuerdo y en donde se está llevando a cabo la treceava Bienal de Arquitectura de esa ciudad llena de agua y canales y puentes y góndolas y gondoleros y ahora ratasvoladoras pintarajeadas y cuyo nombre aún no me recuerdo.
  Dejo aquí con horror una muestra gráfica de este crimen para que el mismo no se vuelva a repetir en otras especies  perjudiciales para nuestra especie. Y es que si a un par de chiflados se le ocurrió pasar pintura en aerosol a unas ratasvoladoras, ¿qué es lo que podría suceder después? Oh, no, Jhonny, me pongo a temblar... ¿¡y después que!? ¿¡Piojos invisibles, moscas musicales, cucarachas fosforescentes, arañas perfumadas...!?
   Juzguen por ustedes mismos... 


   Bueno... sí, sé que son unas criaturas bastante fastidiosas y dañinas... pero... bueno, así pintaditas no se ven mal, ¿no?, no se les ve mal, ¿no es cierto, no, no? Hasta como que dan ganas de tener una que otra, ¿no?, como aves para el jardín, ¿no?
   ¿Qué tú piensas Jhonny, a ver si nos las ingeniamos y nos ponemos a pintar gallinazos?


"Jhonny, estas ratasvoladoras se ven muy locas... Uatafak!"