Star wars : ¿existirá una nueva esperanzA?
Jhonny (sin pedirte disculpas) mira que le voy con una nueva manifestación de mi enfermedad al escribir esta vaina. Y va así: la decisión de los estudios Disney de encargar la
dirección de Star Wars Episode VII a
J.J. Abrams, el mismo director que revivió con notable éxito la franquicia de Star Trek, fue una sorpresa para todos.
Pero la noticia cayó como un gigantesco bloque de carbonita sobre la facción ortodoxa de
fan áticos de la serie de películas más exitosa del Cine, para quienes la revelación
de los ejecutivos del estudio del Ratón Miguelito era un auténtico disparate, un constructo sin pies ni cabeza ni orejas ni cola. ¿Para mí, para un
fan ático...? Perdón. ¿Para mí, para un simple ser humano condicionado desde hace mucho tiempo a la absurda fantasía de esa galaxia muy muy lejana? Pues solo
me queda parafrasear a la princesa de Alderaan (cuya real anatomía el día de hoy no agradaría ni siquiera a Jabba el Hut) y cuestionarme cual flaquita en apuros: J.J. Abrams… ¿eres mi única esperanza?
Antes de continuar con esta gansada debo declarar algo: AGRADEZCO A DIOS, CON TODA MI ALMA Y TODO MI CORAZÓN Y TODO MI CUERPO SAGRADO, QUE EL H.D.P.C.D.S.M. DE GEORGE LUCAS NO ESTÉ A CARGO DE LA DIRECCIÓN DE LOS NUEVOS EPISODIOS DE STAR WARS. Eso es todo un alivio.
Continuemos.
¡ NO, UN MOMENTO ! Pienso que con lo escrito arriba estoy representando a todos los que estamos afectados por el Virus Star Wars y descontentos por el trabajo reciente del Creador, y, te lo decimos George, esperamos que tu destino sea este:
Continuemos.
¡ NO, UN MOMENTO ! Pienso que con lo escrito arriba estoy representando a todos los que estamos afectados por el Virus Star Wars y descontentos por el trabajo reciente del Creador, y, te lo decimos George, esperamos que tu destino sea este:
¡SEEEEEEEE! Chingón destructor del arte, que te pudras (cosa que no es posible, creo) dentro de un cofre de carbonita.
Bueh, es un dulce deseo, pero todos sabemos que la verdad va seguir siendo esta:
En fin, la vida continua, pero de cualquier forma, Georgie, estamos más que felices de que no nos vayas a malograr por anticipado la fantasía de ver algo mejor y diferente de tu sintético estilo en la dimensión cinematográfica de Star Wars (aunque te sigas pudriendo en tus billones por tus juguetitos).
La buena noticia es que tenemos una nueva mano a cargo de la batuta de la dirección del por estrenarse (en 2015) Episodio VII: el señor J.J. Abrams...
¿¿¿¡¡¡ QUE QUIÉN ES J.J. ABRAMS !!!???
Si no saben quién es J.J. stonces realmente están en nada. A ver, voy a ser un poquitín formalón en adelante, aunque no garantizo que no se me suelte la muñeca... ¡sauuuuu!
Entre los directores posibles que se barajaron para hacerse cargo de la nueva entrega
de Star Wars figuraba el apellido
Abrams al lado de nombres como Alfonso Cuarón, Christopher Nolan, Guillermo del Toro, Matthew Vaughn e incluso el veterano George Miller. Cada candidato reunía
distintos puntos de interés para Mickey Mouse. Pero para quienes desde 1977 en
adelante nos habíamos convertido en incondicionales a rabiar de la saga de los
Skywalker era casi impensable que la elección recayera en J.J. (pronúnciese "yei-yei"), dada la
eterna y mortal rivalidad entre los seguidores de Star
Wars y los de Star Trek. En
términos sencillos: para los fanáticos de ambos lados el director escogido no
podía dedicarse a las dos franquicias por un elemental sentido de compromiso de
intereses entre dos mundos de ciencia ficción distintos (además con adeptos en
constante y absurdo conflicto ideológico).
Y sin embargo J.J. (recuerden pronunciarlo como "yei-yei") es, oficialmente, el
encargado de tener la batuta cinematográfica de ambos universos.
¡Hey, un momento, no se me amotinen! No se dejen engañar por esta cara de nerd con nariz de glande. El tipo tiene un excelente criterio para la dirección, y lo ha demostrado con gran calidad en poca cantidad (que siempre es lo mejor en estas vainas cinematográficas). Fue el genio que revivió la malograda serie de películas de Star Trek, y los aficionados al cine, pero sobre todos los fan áticos de Star Trek, le han agradecido de rodillas hasta el cansancio que lo haya hecho. Y es por esta razón que existen muchos comentarios encontrados acerca de su futuro trabajo en Star Wars. Vamos con una ligera histeria de los hechos.
Cuando J.J. (recuerden: "yei-yei") le comunicó a los estudios
Paramount (encargados de Star Trek)
el interés que Mickey tenía para que dirigiera el séptimo episodio de Star Wars, los directivos le pidieron
que no abandonase la producción de la tercera parte de las taquilleras aventuras de la
tripulación de la U.S.S. Enterprise. J.J. ("yei-yei") puso en claro que se
sentía comprometido con el proyecto Star
Trek pero, dada la apretada agenda que iba a significar su nuevo trabajo, podría
dedicarse a la producción del film más no a la dirección. Paramount accedió y
J.J. delegó en Rupert Wyatt la labor de dirigir la nueva película. Teniendo entonces
las manos libres para sumergirse en el reto de darle nueva vida al universo de
caracteres estrenado por el nefasto George Lucas en 1977, J.J. recibió todo el apoyo de
Mickey y compañía y de la aún existente Lucas Films cuya presidenta, Kathleen Kennedy,
prácticamente ha dado a entender a los medios de información que la confianza que tienen en el
trabajo de J.J. supera toda expectativa. Bueno, Jhonny, francamente estamos frente a un hombre
muy afortunado que, sin buscarlo, ha hecho realidad un sueño de la infancia.
Jeffrey Jacobs Abrams ("Yei-Yei") nació en Nueva York
en 1966. Las profesiones de su padre y madre jugaron un papel decisivo en la futura
formación de este neoyorquino criado en Los Ángeles ya que ambos fueron productores
televisivos. El joven J.J. tenía 11 años cuando Star Wars fue estrenada en los Estados Unidos en 1977 (yo tenía 8 añitos) y, en sus propias
palabras, la película literalmente le reventó la mente. Por esa época J.J. tenía amigotes que eran
grandes admiradores de Star Trek,
pero el futuro director (de Star Trek) se sentía incapaz de engancharse con una serie de televisión con una
marcada temática científica, moral y filosófica y seguramente hasta aburrida para un niño de 11 años (a mí tampoco me gustaba Star Trek por esa época).
Una temática por completo
opuesta al reciente fenómeno cinematográfico de Star Wars cuyo éxito se basó en la sencillez
de un nuevo enfoque de la visceral lucha entre el bien y el mal y en unos
efectos visuales nunca antes vistos en la pantalla grande. J.J., desde ese
momento, se convirtió en un incondicional más de la creación del innoble Lucas (como servidor),
relegando al capitán Kirk, al comandante Spock y al resto de la tripulación de
la Enterprise a una zona de mero
interés cultural. Con el tiempo y gracias a la cuna de oportunidad laboral de
sus padres J.J. se convertiría en un polifacético artista de la industria
cinematográfica y televisiva: actor, compositor, guionista, productor y
director. Entre sus producciones se cuentan las series televisivas Felicity, Alias, Lost y Fringe y la película Cloverfield. En 2006 dirigió su primera
película para el cine, Mission : Impossible III, un efectivo ejercicio dentro del género de acción y que dejó
muy satisfechos a los directivos de la Paramount, el estudio que produjo esa
película. En ese tiempo los mandamases del estudio estaban evaluando si relanzaban las olvidadas
y maltratadas (por no mencionar nada taquilleras) aventuras del capitán Kirk y compañía,
pero no encontraban un director que quisiera aceptar un proyecto de dudoso
resultado. Paramount decidió entonces arriesgarse por el novel director (aunque
con gran experiencia en la producción) para darle nueva vida a una serie que francamente ya tenía el pie en la tumba. J.J. aceptó con ciertos reparos, en principio
porque no tenía ninguna afinidad con Star
Trek pero sobre todo porque la
Paramount tenía la idea de apostar por una producción con todos los chiches
digitales posibles para superar en espectacularidad visual a los Episodios I,
II y III de Star Wars. Este fue un
punto decisivo pues J.J., como millones de fanáticos en todo el mundo, no
quedó satisfecho con los dos últimos mamotretos del antipático Lucas a causa de la notoria
artificialidad que estas tenían como consecuencia del abuso de la tecnología
digital. J.J. condicionó stonces su participación como director de Star Trek si y sólo si esta se realizaba de
la manera más física posible, al viejo estilo, usando escenarios reales,
trabajando con maquetas y dejando la chamba digital para lo estrictamente
necesario. La aceptación de este requisito
por parte de la Paramount dejó a J.J. confundido y satisfecho ya que no
estaba muy seguro de querer seguir adelante con el proyecto. Así que no le
quedó otro camino que empaparse de todo el conocimiento existente sobre el
universo de Star Trek y meterse de
lleno en la difícil labor de resucitar a la franquicia.
En 2009 J.J. estrenó Star Trek.
El resultado fue francamente brillante.
J.J. logró
transmitir una sensación de realidad física y de humanidad palpable en la
película como no se había visto en mucho tiempo en el cine de aventuras de
ciencia ficción. Dejó por los suelos a Star
Wars, y lo escribe un defensor (condicionado, repito) de esta serie. En
verdad dejó al infeliz de George Lucas peor de lo que ya estaba al realizar una eficaz
dirección dramática dentro de una realidad ficticia (algo que me hubiera gustado
ver en los lamentables tres primeros episodios de Star Wars). Dándole énfasis a la acción y sin dejar de lado el
espíritu científico y sociológico de la popular serie de televisión de los años
60 del siglo pasado, J.J. reinventó la tripulación original creada por Gene
Roddenberry en 1966 con un artilugio
paracientífico: cuando una desconocida nave Romulana viaja desde el “futuro” y
aparece de improviso frente a una nave de la Federación a la cual destruye,
muere el padre de quien se convertiría en el capitán James T. Kirk; este evento
origina una alteración en la línea de tiempo ya que al no tener la orientación
de su padre (como en la serie original) Kirk desarrollaría una personalidad
distinta al personaje de la serie de televisión, evento que a su vez influye en
el resto de los personajes y en el resto de la trama histórica original, con lo
cual J.J. logró un sólido soporte para una película de ciencia ficción que
hizo las delicias de fan áticos y no fan áticos. Para mí, que jamás tuve interés
por el mundo trekkie (aunque, debo
admitirlo, vi todas las películas de la franquicia, mas no las series), resultó
una más que agradable revelación cinematográfica que me hizo detestar aún más
(si tal cosa es posible) las patinadas del maldito Lucas con las precuelas de Star Wars.
Y este año llegó Star Trek Into Darkness. Nuevamente J.J. demostró tener un
manejo de escena impecable, donde la acción (superior en cantidad y calidad a
la primera entrega) articula a la perfección con el desenvolvimiento de los
personajes. Jhonny: todo está donde debe estar, no existen vacíos ni elementos de
sobra, la historia en apariencia compleja fluye sin dificultad, con acertadas
pinceladas de humor, y el espíritu de Star
Trek no deja de estar presente en cada una de las escenas. Un trabajo
sobresaliente donde, al igual que la primera película, son la solidez de los
personajes y la sensación de realidad física lo que marca el cimiento principal
de la historia.
Stonces… ¿he cambiado de religión, he
dejado atrás el Templo Jedi para convertirme en un seguidor de la Filosofía
Vulcana? No, ni lo uno ni lo otro. En materia de “lealtades” aún sigo
contaminado por el Virus Star Wars,
así que no podría abrazar con facilidad los principios de la Federación. Eso a
nivel emocional. Pero si hablamos de un asunto de apreciación cinematográfica
pues sí que puedo decir
J.J. le ha dado una lección al género del cine de aventuras de
ciencia ficción y ha dejado en claro que una cámara cinematográfica de
película genera (todavía) una sensación de realismo que el cine digital es
incapaz de lograr. Es por eso que ha decidido trabajar de nuevo con quien fuese
el director de fotografía de sus dos películas de Star Trek, Dan Mindel, y realizar el Episodio VII en 35mm y no en formato digital (aunque también se
estrenará una versión convertida a 3D). Y al igual que en sus películas anteriores
J.J. va a filmar en el mayor número de escenarios reales y minimizar los
entornos digitales. Pero tal vez el anuncio más importante que ha hecho el
director es algo que a muchos ha dejado con incertidumbres y a otros tantos ha
llenado de expectativas: la nueva entrega de Star Wars va a tener menos fuegos artificiales y más contenido
dramático. La idea parece ser regresar al espíritu original de las primeras películas, sobre todo al
espíritu visual y dramático de The Empire Strikes Back. Pero, como algunos fanáticos ultraconservadores se preguntan,
¿será capaz J.J. de asumir la carga de dos universos enfrentados y
entregar un producto tan o más satisfactorio que lo que hizo en Star Trek? Y al ser J.J. un fanático
declarado de Star Wars, ahora que va
a ser el amo y señor del legado del innombrable, ¿la próxima entrega de Star Trek mantendrá la calidad de sus
predecesoras? Al respecto J.J. dijo que “no hay una metaestrategia para esto,
no hay un plan Maquiavélico. Fueron simplemente dos oportunidades de estar
envuelto en dos series de películas dispares que son más grandes que todos
nosotros. No siento ninguna clase de enfrentamiento similar a Coca vs Pepsi en esto. Parece que hay
suficiente ancho de banda para que estas muy diferentes historias coexistan. Me
siento increíblemente afortunado de estar envuelto en cada una de ellas”.
¡¡¡ TOMA ESTO
LUCAS MAMONASO !!!
Son
palabras alentadoras, Jhonny, o al menos tienen la apariencia de serlo, tanto para los trekkies como para los seguidores de Star Wars.
¡Ah, J.J., aguanta hermano! Dale un vistazo a esto, tal vez te ayude a hacernos felices:
¡Ah, J.J., aguanta hermano! Dale un vistazo a esto, tal vez te ayude a hacernos felices:
Como muchos otros mesmerizados e idiotizados seguidores de la millonaria franquicia de Star Wars espero una justa reinvindicación sobre las melcochas digitales que dirigió aquel cuyo nombre y apellido deben olvidarse.
Y me atrevo a decir: J.J. Abrams… ¿eres nuestra única esperanza?
Ojalá que así sea.
Jhonny, J.J. Abrams está recontralocaso... Uatafak!!!
ANEXVS
1.- Si han llegado hasta aquí (benditos sean) les recomiendo que busquen y vean este documental : "The People vs. George Lucas". Si no son fan áticos de Star Wars este film les puede dar una idea bastante cercana del disparate-genialidad que este fulano ha hecho por el cine y la industria de baratijas cinematográficas. Una sinopsis del documental la pueden ver en ¡¡¡ SURPRAIS SURPRAIS !!!
2.- Vean la versión formal (sin payasadas y resumida) en :
http://espacio360.pe/noticia/cultura/star-wars-existe-una-nueva-esperanza-9b11
2.- Vean la versión formal (sin payasadas y resumida) en :
http://espacio360.pe/noticia/cultura/star-wars-existe-una-nueva-esperanza-9b11
